Cuando lo más simple y sencillo se vuelve imprescindible

Un pequeño lápiz, una goma, un cuaderno. Millones de niños y niñas ansían tales «lujos». Y sí además, en ese necesario «kit» de colegio, añadimos una pequeña lamparita solar. La campaña de «Agua de Coco» y «Light humanity» lo hace posible. La mayoría de los hogares en Madagascar no cuentan con luz eléctrica y los que sí cuentan con luz tienen que adaptarse a los constantes cortes de electricidad. Además el alto coste de la electricidad puede ser algo imposible de asumir para muchas familias en riesgo de exclusión. «Ante la crisis sanitaria del COVID-19, nos hemos visto en la necesidad de cerrar nuestros centros educativos, pero no sin asegurar la continuidad de los estudios de nuestros estudiantes desde sus hogares. A raiz de esta situación nos hemos dado cuenta del enorme escollo que supone la falta de luz en sus hogares para la mayoria de nuestros estudiantes, es por eso que hemos llegado abierto una vía de colaboración con Light Humanity, para ofrecer a nuestros estudiantes una fuente de luz ecológica y segura que no implique los riesgos de las lámparas de queroseno.»

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